La biotecnología es la ciencia basada en emplear diversos organismos vivos con el fin de obtener bienes y/o servicios que sean de utilidad para las personas. La utilización de este campo de estudio ha ido incrementando con el paso de los años, teniendo así una larga trayectoria, la cual remonta a la elaboración de alimentos como el vino y pan, lo cual da a entender que sus inicios fueron hace miles de años.
Hoy en día se ve la utilización de dos tipos de biotecnología, la tradicional y la moderna, ambas con el objetivo de experimentar y crear nuevos productos a beneficio de los humanos. A pesar de ser más nombrada la moderna, la biotecnología tradicional sigue rindiendo sus frutos, por lo que dejarla de lado sería un gran error.
¿Qué es la Biotecnología Tradicional?
La biotecnología tradicional se basa en la aplicación de técnicas antiguas para usar a los organismos vivos en la fabricación de productos nuevos o también en la modificación de los que ya existen. Este método se inclina más a obtener y utilizar los productos que provienen de ciertos organismos vivos a beneficio del hombre.
Cuando se habla de una definición más profunda para este estudio, se explica que la biotecnología tradicional se trata de la evolución del hombre, que pasó de ser cazador a un agricultor; al hacer ese cambio se pasó a recolectar diversas especies de plantas silvestres para cultivarlas. Posteriormente, estas personas se volvieron especialistas al momento de obtener y clasificar las plantas, separándolas así en grupos específicos que con el paso de los años se fueron estudiando y que hoy en día las tenemos en diversas presentaciones, como alimentos y medicinas.
También, mediante la domesticación de animales, se logró la obtención de diversos bienes, como queso y yogurt. Todo ocurrió de manera accidental, cuando se pudieron observar y utilizar los procesos naturales que acontecen dentro de las células vivas, y a pesar de no tener en ese momento una explicación científica para lo que ocurría, aplicaron esos resultados a sus vidas cotidianas. De allí se fueron descubriendo nuevas cosas, un ejemplo es el proceso de fermentación.
Ya luego, con la llegada de la tecnología, se aprendió a controlar y a crear en grandes cantidades de productos biotecnológicos.
Productos de Biotecnología Tradicional
El uso de la técnica tradicional se emplea mayormente a la producción de alimentos, logrando que sean de larga duración o más resistentes al momento del cultivo.
Procesos como la fermentación, hibridación y el mejoramiento selectivo, son los más comunes y por los que pasan los productos que posteriormente consumimos. Y entre los productos recibidos y consumidos está el pan, el vino (en el cual se aplica la fermentación), leche y sus derivados, como el queso y el yogurt. También se encuentran las verduras, a las que se les hace un proceso distinto, este se basa en hacerlos más resistentes ante potenciales plagas y adversidades climáticas.
Otro ejemplo de los productos ofrecidos por la biotecnología tradicional, es la elaboración de la cerveza y el malteado, cuyos procesos incluyen la germinación de la cebada junto con la fermentación por levaduras.
Así se ve que la biotecnología tradicional no pierde su lugar ante la moderna, ya que de ella se producen alimentos de consumo diario que tienen gran importancia en la alimentación de todos.